La senadora perremeista Ginette Bournigal consideró que las acusaciones en contra del presidente de la Cámara de Cuentas, Janel Ramírez, por supuesto acoso sexual que involucran a dos empleadas de esa institución “se ven como manejadas”.
Insistió en que por esos “chismecitos”, que entiende no han sabido enfrentar a lo interno del pleno de ese órgano, los funcionarios involucrados en esas acusaciones tomen una licencia.
Al ser entrevistada sobre el tema por los periodistas, la legisladora por Puerto Plata insistió que “si yo fuera ellos, todos los involucrados en la denuncia, yo pusiera el cargo a la disposición del Congreso Nacional porque hay políticos detrás de ellos. Ya le están poniendo nombres y apellidos. Ya la maledicencia se ha hecho cargo y las especulaciones en esas personas. Ya eso es feo, es deprimente”.
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Agregó que las denuncias realizadas en contra de Ramírez “son sospechosas” y que los miembros del pleno deben recordar que hicieron un juramento en el Senado antes de tomar posesión y que debieron tener la capacidad para resolver sus conflictos de forma interna en esta institución.
Para ella también las empleadas que realizan las acusaciones han visitado instancias que no debieron debido a que pudieron acudir ante ambas cámaras del Congreso Nacional donde existen comisiones permanentes cuyos miembros pudieron contactar.
Precisó que en estos momentos se deben enviar mensajes de que impera la institucionalidad, que existen instituciones fuertes e íntegras y lamentó que “esos chismecitos la han despertado” (a la Cámara de Cuentas).
Periodista con más de 20 años de ejercicio profesional. Actualmente es redactora senior del periódico Diario Libre.
